Referentes de nuestro país opinan sobre el espectáculo

"Me interesó mucho este trabajo. Creo que apunta a la esencia del teatro: Tiempo, Espacio y Verdad. No conocía a los actores y me quedé impresionada con su talento y la energía que manejan. Felicitaciones a todos."

Mariana Wainstein (Directora)

"Fina, deliciosa. Por fin ni un atisbo de violencia. La pieza hecha como para nuestros actores Luciana y Javier. Bien actuada, bien dirigida, y con apoyos sobrios y acomodados en escenografía, vestuario e iluminación. Muy buena faena. Gracias por permitirnos verlos."

Carlos Torres (Iluminador)

"Es una obra con un desafío a la reflexión, de consecuencias teatrales muy interesantes."

Berto Fontana (Actor, Foniatra)

"Lo mío es el cine y no el teatro, pero en ambos sé cuando algo o alguien me parece auténtico. La actuación de Luciana Acuña -lo que fui a ver en Pieza para dos actores es de una gracia, precisión y entrega, que se transforma en un verdadero disfrute de principio a fin. Sin duda que ha habido una dirección rigurosa y creo que a la vez estimulante para la búsqueda por parte de los actores, pero hay pequeñas cosas que están sólo si ya se tienen, si vinieron con la mochila de la vocación. El temperamento y humor a lo Hunter de Luciana la pondrán seguramente en el futuro bajo muchas luces; de teatro algunas, de cine otras.
Hay ahí un talento."


Enrique Fernández
Guionista y codirector de El baño del Papa

ILUSION Y SUEÑO
"Pieza para dos actores de Víctor Vegas enfrenta varios mundos a la vez. El mundo de dos jóvenes hermanos, que se encuentran en un plano donde todo es casi onírico, casi real y por momentos absurdo. El otro es el plano del espectador, que está pendiente de la obra y se encuentra más con los pies sobre la tierra, tomando distancia del hecho teatral pero a la vez "viviendo" aquella "realidad". Por otra parte está la visión del autor que no es igual ni a la de los primeros ni a la de los segundos, porque él concibió una obra con una realidad subjetiva y un sueño subjetivo y por último el director que unió el presunto sentir del autor y el suyo propio, escenificando un mundo donde los sentimientos, la candidez y el atreverse a soñar se unen para dar como resultado un espectáculo donde dos jóvenes tratan de sacar lo mejor de sí para hacernos soñar como ellos lo hacen. Hay inquietud y frescura en sus actuaciones. Una prueba no fácil para Acuña y Barboza de la cual salen airosos, y un saludo al retorno del director Antonio Baldomir."

María Rosa Carbajal
(Crítica Teatral)